El origen del nombre

Imagen enviada por Winnie - Lo que se ve es lo que hay

Había llegado al pueblo y era la mayor de las atracciones de la feria. Su música, el movimiento de los caballitos, el vaivén, los colores... todos los niños estábamos encantados con el carrousell, que así lo llamaban los franceses. Éste de la fotografía está a los pies de Montmatre, en París.

Una tarde, cuando la caseta de tiro abrió, el algodón de azúcar ya fabricaba nubes y las cañas de pescar patitos aclamaban la atención de todos, el carrousell estaba parado. Llegó la gran desgracia. Algo había ocurrido. ¿Habrá muerto el encargado?

Los niños acudimos en tropel a enterarnos de lo que sucedía y tal era el ruido que hicimos que en un dos sin tres se levantó el encargado de sus siesta asustando a todos a la vez que esclamábamos: "Está vivo. El tío está vivo". De ahí su nombre.

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