Un invento de Adrianos y sus memorias
Para romperse la cabeza no hace falta pensar mucho. Tómense varios tablones viejos, sujeten más o menos uno transversal y accédase a él por medio de una escalera de las mismas características. Una vez arriba, de unos saltos olímpicos y su cabeza, al caer, quedará destrozadita. Felicidades.
El blog del día: Desde mi cementerio
14 comentarios:
jajajaja, arqutectura en estado puro...múerase el bricomanía habiéndo artistas así.
Besucos!
¡Pero eso debe doler!... tal vez, si uno tomase unos cuántos tragos de "algo fuerte", esto haría las veces de "anestesiante natural", ¿no? Sería cuestión de probar.
Saludos, un placer pasar por aquí.
vaya tarmpolin más chungo.
hombre en el mejor de los casos te puedes caer en la piscina y no romperte los sesos.
Ah, bueno, con instrucciones ya es más fácil ;-)
"Más dura será la caida"....besos
Auuuu¡¡¡ ;P
dirty saludos¡¡¡
Pero cari, sólo en el caso de que abajo no hay agua, no? Si no queda un trampolín de lo más apañao, jaja
Bezos.
Toma ya! Esto es obra de manos a la obra no?
Slds,
X
¿salto primitivo a una piscina moderna?
yo no me destrozado la cabeza
... ¿o si?
Lástima no tener piscina, que si no aquí iba a estar yo!!!!
OMG ¡¡ Que miedo ..
Besos.
Ouch!!!
Solo de imaginar, ya me dolío.
Que te he mandado una escalera al correo y esta tambien en mi blog:
www.casacelis.blogspot.com
Salu2!
Mientras lo montan...se puede esperar en la piscina?
Tiene toda la pinta de haberla hecho Pepe Gotera y Otilio.
Publicar un comentario