viernes, 26 de agosto de 2011

Faltan manos

Para bajar al sótano, más exactamente a uno de los búnquer que Gadafi tenía en Libia, faltan manos. Para sujetar el arma, para sujetarse a la escalera, para llevarse el contenido del interior. La ciudad subterránea de Muamar Gadafi no era sólo un rumor. El laberinto del líder libio existe y está dotado de un búnker con dormitorios climatizados, carritos de golf o máscaras antigás. Dos días después de tomar el complejo presidencial de Bab al-Aziziya, los insurgentes comienzan a explorar la red de túneles que se extiende bajo el que fuera el cuartel general del líder libio.

4 comentarios:

Unknown dijo...

pareciera de ciencia ficción, sinembargo es tan real....buena foto

emejota dijo...

Temor simple (el de Gadafi), tanto como lo complicado de semejante laberinto. Beso.

Uno dijo...

He alucinado con las declaraciones del alemán que diseñó esas conducciones de agua por las que pueden circular coches. Va a ser imposible, me temo, pillar a esa rata.

Anónimo dijo...

A mí, de pequeño, me impresionó ver la detencion y fusilamiento, casi en el acto de NICOLAU CEAUCESCU y su mujer, por la revolución anti-comunista en RUMANIA... luego me enteré que mientras que el pueblo, en las cartillas de racionamiento tenía derecho a una rodaja de salami semanal, ellos comían caviar... ahí aprendí, sin libros de historia, directamente del TELEDIARIO, cuán justo es que el pueblo se rebele...