El observador descubre (II)

El interior de una antigua iglesia, convertida en Centro Cultural con salas de conferencias y biblioteca, marca el aprovechameinto de los edificios para usos diferentes de los originales, manteniendo su estructura. Una buena idea a seguir. ¿Imaginas las catedrales convertidas en apartamentos?

Pues convertimos los edificios en hoteles, como este pequeño de la villa de Xefxauen, donde hasta las maletas deben subir y bajar de perfil. En casos así, el ascensor no existe.

Y de un salto se bajan estos tres escalones de una mezquita en su acceso por la parte noble. Solo se abre en muy especiales ocasiones. El resto de los días tiene dos puertas: una para hombres y otra para mujeres.

Y el observador descubre que mucho antes que las grafías varias existieron los símbolos. Sirva esta escalera política para mostrar lo anteriormente expuesto. Los partidos políticos se definen, como en el resto del mundo, por un símbolo. Si en España tenemos gaviotas y rosas, en Marruecos hay escaleras, lámparas, flores, llaves... para ayudar a los votantes en su elección.

Imágenes: Centro Cultural del Padre Lerchundi, en Martil; hotel en la medina de Xefxauen; mezquita de Martil; cartel político.

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