Hoy he respirado un nuevo aire. En mi lucha sistemática e imposible por convertirme en
llanito me he dirigido a Gibraltar porque se celebraba el National Day, es decir, la festividad que conmemora el referéndum de 1967 en el que los gibraltareños rechazaron la soberanía española. Una nube de tormenta cubría el peñón. ¿Cobrarían entrada ya? ¿Ha dejado de ser un parque de atracciones? Los nervios flotaban. Eran las 10.00 de la mañana y sin desayunar nos dirigimos hacia la frontera, con el DNI en la boca.
En el camino recto que trasncurre entre La Línea de la Concepción (Cádiz) y Gibraltar, se están abriendo locales comerciales con artículos de ropa, souvenirs, agencias de viajes, cafeterías... El turismo es lo que tiene: Dinero que gastar, pues pónganse tiendas.
Fascinante. Absolutamente fascinante. Los escaparates avisaban de la celebración. Ropas combinando el blanco y el rojo iban a ser la tónica de la jornada. ¿Sólo los comercios?
En absoluto. Miles, miles y miles vestiamos con prendas rojas, blancas, combinadas, lazos, pinbturas en la cara. Fiesta y alegría, canciones en las plazas, suelta de globos, discursos, abrazos, niñatos, llanitos por doquier... y yo uno más entre ellos. Feliz. Y una cervecita, que no viene mal.
En la plaza del Ayuntameinto o de la sede gubernamental o como quieran llamarlo, cada rincón estaba ocupada por el bicolor. Ejemplos: Niñata de blanco y sujetador rojo y niñato del polito blanco con líneas rojas.
A cualquier parte donde quieras mirar los encontrabas. El ambiente, festivo exclusivamente. Un triunfo de concordia.
Pero llegó la hora de los discursos, donde los políticos siempre meten la pata, y se afirmó la frase. Leo que el líder de la oposición gibraltareña,
Joseph Bosanno, del Partido Socialista Laboralista de Gibraltar (GSLP), ha asegurado hoy que Gibraltar "nunca volverá a ser español". Bueno, pues que diga lo que quiera. Yo estaba de fiesta... pero empezó a llover. La tormenta de la que hablaba...
Fuimos al aeropuerto a tomar el primer avión que llegara. Ahora que es compartido entre las dos partes es un gustazo poder ir andando desde cualquier parte.
Y sonreí porque por un día había conseguido ser llanito. Sea Gibraltar español o no. Un circo.
Hoy he respirado un nuevo aire. En mi lucha sistemática e imposible por convertirme en llanito me he dirigido a Gibraltar porque se celebraba el National Day, es decir, la festividad que conmemora el referéndum de 1967 en el que los gibraltareños rechazaron la soberanía española. Una nube de tormenta cubría el peñón. ¿Cobrarían entrada ya? ¿Ha dejado de ser un parque de atracciones? Los nervios flotaban. Eran las 10.00 de la mañana y sin desayunar nos dirigimos hacia la frontera, con el DNI en la boca.
En el camino recto que trasncurre entre La Línea de la Concepción (Cádiz) y Gibraltar, se están abriendo locales comerciales con artículos de ropa, souvenirs, agencias de viajes, cafeterías... El turismo es lo que tiene: Dinero que gastar, pues pónganse tiendas.
Fascinante. Absolutamente fascinante. Los escaparates avisaban de la celebración. Ropas combinando el blanco y el rojo iban a ser la tónica de la jornada. ¿Sólo los comercios?
En absoluto. Miles, miles y miles vestiamos con prendas rojas, blancas, combinadas, lazos, pinbturas en la cara. Fiesta y alegría, canciones en las plazas, suelta de globos, discursos, abrazos, niñatos, llanitos por doquier... y yo uno más entre ellos. Feliz. Y una cervecita, que no viene mal.
En la plaza del Ayuntameinto o de la sede gubernamental o como quieran llamarlo, cada rincón estaba ocupada por el bicolor. Ejemplos: Niñata de blanco y sujetador rojo y niñato del polito blanco con líneas rojas.
A cualquier parte donde quieras mirar los encontrabas. El ambiente, festivo exclusivamente. Un triunfo de concordia.
Pero llegó la hora de los discursos, donde los políticos siempre meten la pata, y se afirmó la frase. Leo que el líder de la oposición gibraltareña, Joseph Bosanno, del Partido Socialista Laboralista de Gibraltar (GSLP), ha asegurado hoy que Gibraltar "nunca volverá a ser español". Bueno, pues que diga lo que quiera. Yo estaba de fiesta... pero empezó a llover. La tormenta de la que hablaba...
Fuimos al aeropuerto a tomar el primer avión que llegara. Ahora que es compartido entre las dos partes es un gustazo poder ir andando desde cualquier parte.
Y sonreí porque por un día había conseguido ser llanito. Sea Gibraltar español o no. Un circo.
13 comentarios:
yo nací en el 67....y no conozco Gibraltar....y ....tengo ganas de viajar y de pocas polémicas...besos
rojo y blanco ¿todos los de gibraltar son del atlético de madrid? qué curioso. lástima que no fuera san patricio, así la gente hubiera ido borracha seguro...española (mahou) o inglesa (la que prefieras)
Me ha hecho cierta ilusión ver las fotos de Gibraltar, mi madre es medio llanita y todos los sitios que muestras los conozco, desde la primera foto hecha desde La Línea hasta la última foto.
Besucos!
ese es el famoso estrecho con las monarquías se disputan , no para servir a su país , sino para pasar sus idilicas vacaciones allí .
winnie Pues los perfumes están más baratos, el tabaco también, el alcohol... y puedes pagar en libras.
didac Dependiendo de los puntos de vista, o somos del Atlético de Madrid o somos llanitos. Pero alcohol... se reparte tinto de verano en botellas de 2 litros.
weblara Pues son fotos de hoy mismo.
the post mortem Creo que no se lo disputa nadie. Está así...
UN post con after, un post con alegría. Un post con final feliz. Un post llanito. Y unas escaleras llanitas también.
gad Y calentito, calentito el post.
Y el niñato del polo a rayas está muy celebrable. ¿Estaba la frontera tranquila o ha habido que esperar mucho?
Yibraltar is mainnnnnnn!!!!
Ya notaba yo que hoy estabas como ausente, jaja que cosas, cari, ya te noto si estás por ahi o no, esto es una comunión galego-llanita....
Ya me dirás tu pa que quiere ser llanito... Y ya no digo nada del niño dle polo, pq se lo ha pedido Theodore, jajja
Bezos
theodore Un paseo de entrada y uno de salida. Ninguna aglomeración más que lo acostumbrado. Pocos vehículos. Hoy no era el día que más gente entraba o salía. Además solo era fiesta y las tiendas estaban cerradas.
thiago Bala me da recuerdos para ti. He visto a un otro niño con una kipá... que me lo hubiera comido.
Me cansan las banderas, las fronteras y los mapas que no sirven únicamente para saber a donde vas.
Carpe Diem
Que la reina de G.B (four points) te regale el ñosco pa tí, pa tí.
cosecha Cuando cruzo una frontera respiro fuerte para inhalar el aire del nuevo lugar. Así se es más feliz. En el regreso hago lo mismo en el país de origen.
jaime Y lo enmarcaré. El ñosco, digo.
Publicar un comentario